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Conceptos Básicos
¿Qué educación merece el perú?
“El Plan Maestro”
Problemática
Esta imagen recuperada del diario La República, abril 2019, muestra el proceso de Evaluación Censal de Estudiantes (ECE), realizada por el Minedu entre el año 2016 y 2018 en diferentes colegios públicos de nuestro país.
Conceptos Básicos

Un concepto para comprender el problema de la ineficiencia educativa es el de educación pública. Según la RAE (Real Academia Española), esta es el servicio público de educación que se presta a través de los centros públicos de enseñanza y los centros privados concertados. Con el fin de conseguir un completo y correcto entendimiento del tema, además se debe tener en cuenta ciertas acepciones básicas que se encuentran relacionadas con el sistema educativo como el PBI (Producto Bruto Interno) y la evaluación internacional PISA. El PBI es el valor de todos los bienes y servicios finales producidos por un país en un determinado período (Espinoza, Mori y Vílchez, 2009). Este es uno de los indicativos que se deben considerar cuando se desea calcular la inversión de un país en su educación. El Perú, por ejemplo, invierte el 5.8 % del PBI (Izusqui, 2018). En otros términos, según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID, 2017), el Perú es uno de los países que menos invierte en educación pública en América Latina. Por último, cabe resaltar la importancia de la evaluación internacional PISA, la cual es un programa de evaluación que se aplica cada tres años y busca conocer en qué medida los estudiantes de quince años son capaces de utilizar los conocimientos y habilidades necesarios para hacer frente a las situaciones y desafíos que les plantea la sociedad actual (UMC, 2016). En esta evaluación, el Perú ocupó el puesto 64 de 70 en el año 2015 (Perú 21, 2016).
Esta imagen recuperada de la UNESCO (junio 2006), muestra datos estadísticos del presupuesto invertido en la educación, el cual no aumenta de un mínimo de 0,25% anual del Producto Bruto Interno (PBI) por parte del gobierno peruano desde e año 2000 al 2005.
Antecedentes
Existen antecedentes sobre la problemática de la escasa calidad educativa en nuestro país. Según un artículo de Apaza (2016), en la historia de la educación peruana, sucedieron diversos casos en los que se muestran cómo nuestra educación ha sido afectada drásticamente en determinados periodos gubernamentales. Uno de los actos más llamativos sucedió en el primer gobierno de los ex presidentes Alan García Pérez (1985) y Alberto Fujimori (1990). Alan García, en la década del 80, cometió un grave error: en su gobierno, se registró que una gran parte del magisterio ingresó a la carrera pública sin haber estudiado educación; estos laboraban sin título profesional. Por ende, en el gobierno de Alberto Fujimori, en la década de los 90, se realizó una mejora e incrementación estructural en la educación pública, tales como la instalación de computadoras y la capacitación masiva de profesores. Este suceso fue evolucionando poco a poco, aun así, se evidenciaron deficiencias en la educación. Si bien en las últimas dos décadas el Estado peruano ha incrementado la inversión en educación y ha mejorado sus principales indicadores, estas desigualdades profundizan la brecha en los indicadores de cobertura y calidad con estudiantes pobres o pobres extremos, indígenas, o que viven en zonas rurales y estudiantes con alguna discapacidad. Así, por ejemplo, en 2015, la tasa de conclusión de primaria fue de 88% en la zona urbana y 69% en la zona rural. Ante esta situación, la Oficina de UNESCO en Lima apuesta por una educación, relevante y pertinente, inclusiva y equitativa.

Actores Involucrados

El gráfico estadístico elaborado por Minedu (2016), muestra el porcentaje de alumnos matriculados en instituciones públicas y privadas, y los rendimientos que tienen en las áreas de comprensión lectora y matemática.
La ineficiente educación pública es la base de los problemas afrontados por la sociedad peruana, asimismo genera controversias y debates, debido a que son muchos los agentes que influyen en él. Sin embargo, es primordialmente generado por el Estado, quien, según el congresista Armando Villanueva, hasta el cuarto bimestre del 2019, no ha ejecutado más del 30% de las inversiones públicas para la educación, destinado a capacitaciones de docentes, renovaciones de materiales educativos e implementos tecnológicos. Además, el economista Epifanio Baca agregó que la tendencia de una baja inversión pública aqueja al país desde el año 2014. Otro de los agentes sería la ineficacia de los directores, quienes son los encargados de dirigir el servicio educativo, y de los cuales, de acuerdo con la Resolución Ministerial 204-2014-Minedu, solo el 22% está dentro del sistema de meritocracia. Por otro lado, según un estudio elaborado por el SINEACE en el 2018, los principales afectados por este problema son los alumnos, quienes, al culminar la escuela secundaria, solo el 35% ingresa a la educación superior, mientras que el resto (65%) lo hace dos o tres años después, o decide incorporarse a la vida laboral. Por ello, en mandato de la Ley General de Educación, el Consejo Nacional de Educación (CNE) presentó, en el año 2017, a la nación y a sus autoridades el “Proyecto Educativo Nacional al 2021”, en donde propone los diversos factores a considerar para el óptimo desarrollo educacional estudiantil. Corresponde ahora, al Gobierno Nacional determinar la ruta concreta que permitirá poner en marcha el proyecto, pues es quien posee la facultad para implementar nuevas políticas de educación.
La siguiente imagen obtenida del informe de resultados PISA (Minedu, 2017), muestra los resultados de los países latinoamericanos y el promedio de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de acuerdo a los niveles de desempeño. El Perú se encuentra en el penúltimo lugar superando únicamente a República Dominicana.
Datos Estadísticos
Ciertos datos estadísticos revelan que la educación pública del Perú es ineficiente, lo cual se expresa en cifras muy preocupantes. Por un lado, Minedu (2017), en la publicación de su informe, Resultados PISA 2017, indica que el Perú ocupó el puesto 127 de 137 países que participaron en dicha evaluación. Así también, este documento evidencia el bajo desempeño obtenido en las tres áreas evaluadas: ciencias, matemáticas y comprensión lectora. Por ejemplo, en el rubro de Ciencias, el 41.5% de estudiantes desarrollaron el nivel mínimo de la competencia; el 27.9% logró el nivel 2; el 11.5%, el nivel 3 y ningún estudiante obtuvo el máximo nivel. Para complementar esta información, el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI, 2018) afirma que casi 4 millones de estudiantes no comprenden lo que leen. Es más, según la Fundación BBVA (2019), solo 3 de cada 10 alumnos resuelven ejercicios básicos de matemática. Estas cifras revelan, en los estudiantes, casos de analfabetismo disfuncional y la gran crisis educativa que se atraviesa. Por otro lado, tras la última evaluación Muestral de estudiantes (UM), realizada el pasado año, la Oficina de Medición de la Calidad de los Aprendizajes (UMC, 2018) evidencia una considerable disminución académica entre el 2016 y 2018. Tal y como indica Minedu, el segundo grado de primaria registró la mayor caída durante ese periodo. La proporción de alumnos con rendimiento satisfactorio en matemáticas bajó de 37,4% a 14,6%(El Comercio, 2019); es decir, una reducción de casi 25 puntos porcentuales. Finalmente, el Estado desempeña un rol importante para resolver esta problemática, mas no estaría cumpliendo sus funciones. Según el Banco Interamericano de Desarrollo (BID, 2018), durante los últimos 10 años, se ha maximizado la inversión educativa; sin embargo, no alcanzaría el promedio de la OCDE. En comparación con América Latina, el Perú es uno de los países que menos invierte en educación pública con un 5.8 % del PBI (Izusqui, 2018).

Esta captura de pantalla del diario La República (2019), representa la baja inversión que dedica el Estado a la educación. Por ello, los alumnos deben estudiar en las calles, debido a la falta de infraestructura.

Ejemplos
El diario La República publicó una noticia dónde narra un suceso muy grave. Alumnos de Pucallpa estudian en la intemperie de las aulas. Este suceso fue reportado gracias a un ciudadano de la zona que denunció cómo escolares de la I.E n° 60661 de caserío Villa Primera(a 10 km de la ciudad) no cuentan con establecimientos educativos. Este problema causa que las clases se dicten en las calles.

Si hace un año el 20% de peruanos consideraba que la educación escolar pública era buena, ahora la situación ha empeorado. En 2018, solo el 10% le otorga esa calificación, de acuerdo con la encuesta Pulso Perú de Datum Internacional. Pero si cree que la situación en la educación privada es mejor, se equivoca. Solo el 43% considera que es buena (esa cifra alcanzaba al 60% en 2017) y 46% opina que es regular (aumentó un 13% en comparación con 12 meses atrás).
Al respecto, Natalia González, especialista en temas de educación del Instituto de Estudios Peruanos (IEP), dijo que el sondeo tiene un dato interesante: “Está mejorando la percepción que se tiene de la escuela pública porque, en la década pasada, esa percepción era mala. Esto generó que sectores medios y bajos giraran al sector privado”.
Enfatizó que esto creó un mercado de proyectos educativos para sectores populares de muy baja calidad. “Hay que fortalecer la escuela pública en la medida en que poco más del 70% considera que es regular a buena”, destacó.
En cuanto a la percepción sobre la educación privada, recalcó que no se puede generalizar, ya que hay mucha diversidad. “Hay escuela privada de máxima calidad. Pero en los últimos 20 años hubo una explosión de oferta de muy mala calidad”, expresó.
Esta captura de pantalla del diario Perú 21 representa el favoritismo de los peruano entre un colegio estatal y uno privado.
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